Exponiendo al CABAL

domingo, 15 de diciembre de 2024

2024: El clima tiene la culpa y el objetivo es combatir la epidemia con mosquitos modificados por la bacteria Wolbachia y un programa de vacunación contra el dengu.

 2019: La prueba de campo con mosquitos genéticamente modificados puede tener consecuencias fatales. 2024: Epidemia grave de dengu en América Latina.

Reseña: De 2013 a 2015, la empresa británica Oxitec liberó cada semana alrededor de 450.000 mosquitos machos de fiebre amarilla con material genético modificado en Jacobina. El objetivo era controlar la población de mosquitos, que pueden transmitir, entre otras cosas, la fiebre amarilla, el dengue y el virus Zika. Sin embargo, algunos mosquitos sobrevivieron y ahora tienen una composición genética alterada. El instituto de investigación Testbiotech criticó la prueba de campo en 2019: “No se pueden estimar las consecuencias a largo plazo en términos de propagación de enfermedades, reproducción de mosquitos e interacciones con el medio ambiente”, afirma un comunicado más crítico del instituto. de ingeniería genética.
Todavía no estaba claro qué consecuencias tendría la transmisión del material genético modificado sobre las futuras generaciones de mosquitos de la fiebre amarilla, como se publicó entonces en la revista "Scientific Reports".


2024: El clima tiene la culpa y el objetivo es combatir la epidemia con mosquitos modificados por la bacteria Wolbachia y un programa de vacunación contra el dengu.

Ni una palabra sobre los riesgos de los mosquitos genéticamente modificados.

Como informó el Ärzte Zeitung en 2019, Oxitec no detuvo sus experimentos, sino que simplemente cambió su estrategia. La segunda generación de mosquitos genéticamente modificados está programada para que sólo las crías hembras no sean viables. Los machos jóvenes, sin embargo, sobreviven y pueden aparearse con hembras salvajes.
El nuevo programa tiene como objetivo la supervivencia de los mosquitos de la fiebre amarilla genéticamente modificados para contener específicamente la población de hembras peligrosas.


Spoiler: La Fundación Gates ha invertido en la empresa Oxitec. Dondequiera que los humanos se meten con la naturaleza, ahí está el multimillonario.

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