Una nueva investigación de la Universidad de Texas demuestra que todas las justificaciones para mutilar a los niños eran mentiras. Analizaron a más de 100.000 pacientes con disforia de género y observaron los resultados de quienes se sometieron a cirugía en comparación con los que no.
La depresión, la ansiedad, los sentimientos suicidas y el abuso de drogas fueron "significativamente más altos" para quienes se sometieron a cirugía en comparación con los que no.
Repitámoslo: tratar la disforia de género con cirugía de cambio de sexo se asoció con resultados de salud mental drásticamente PEORES.
Los médicos falsos merecen estar en prisión por lo que le hicieron a nuestros niños.
New research from the University of Texas shows that all the justifications for mutilating children were lies. They analyzed more than 100,000 patients with gender dysphoria, and looked at the outcomes for those who received surgery vs. those who didn't.
— Charlie Kirk (@charliekirk11) March 5, 2025
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Las cirugías trans aumentan el riesgo de problemas de salud mental e ideaciones suicidas, según estudio
Esta historia habla sobre el suicidio. Si usted o alguien que conoce tiene pensamientos suicidas, comuníquese con la línea de ayuda para casos de suicidio y crisis al 988 o al 1-800-273-TALK (8255).
Un nuevo estudio ha descubierto que la llamada "cirugía de afirmación de género" podría tener efectos potencialmente peligrosos para la salud mental.
Las personas transgénero enfrentan una "mayor angustia psicológica", que incluye depresión, ansiedad e ideación suicida, "en parte debido al estigma y la falta de afirmación de género", como se afirma en el estudio, que se publicó en The Journal of Sexual Medicine.
Investigadores de la Universidad de Texas se propusieron determinar los impactos en la salud mental de las personas transgénero que se sometieron a una "cirugía de afirmación de género".
El estudio se centró en 107.583 pacientes de 18 años o más con disforia de género, algunos de los cuales se sometieron a cirugía y otros no.
Determinaron que las tasas de depresión, ansiedad, ideación suicida y trastornos por consumo de sustancias eran "significativamente más altas" entre los que se sometieron a cirugía, evaluadas dos años después.
Los hombres con cirugía tuvieron tasas de depresión del 25% en comparación con los hombres sin cirugía (11,5%). Las tasas de ansiedad entre ese grupo fueron del 12,8% en comparación con el 2,6%.
La depresión, la ansiedad, la ideación suicida y los trastornos por consumo de sustancias fueron "significativamente más altos" entre los que se sometieron a cirugía.
Se observaron las mismas diferencias entre las mujeres, ya que las que se sometieron a cirugía tuvieron tasas de depresión del 22,9% en comparación con el 14,6% en el grupo no quirúrgico.
Las mujeres que se sometieron a cirugía también tuvieron tasas de ansiedad del 10,5% en comparación con el 7,1% sin cirugía.
Las cirugías que tenían como objetivo "feminizar a los individuos" mostraron tasas "particularmente altas" de depresión y abuso de sustancias dos años después de los procedimientos, según el estudio.
"Los hallazgos sugieren la necesidad de un apoyo de salud mental sensible al género después de la cirugía de afirmación de género para abordar los riesgos psicológicos posquirúrgicos", escribieron los investigadores.
'No es una panacea'
Jonathan Alpert, un psicoterapeuta y autor con sede en Manhattan, dijo que los hallazgos del estudio resaltan los riesgos psicológicos "a menudo pasados por alto" que acompañan a la cirugía de afirmación de género.
"Si bien estas cirugías pueden ser fundamentales para ayudar a las personas a alinear su apariencia física con su identidad de género, no son una panacea para los problemas de salud mental que enfrentan muchas personas transgénero", dijo Alpert, que no participó en el estudio, a Fox News Digital.
"Estos hallazgos sugieren que la cirugía por sí sola no elimina las complejas cargas psicológicas que surgen del estigma social y las luchas personales con la identidad", continuó.
"De hecho, utilizar un bisturí para tratar un trastorno psicológico a veces puede conducir a más problemas, como lo revelan los resultados del estudio".
El neurocirujano de Florida, el Dr. Brett Osborn, que tampoco formó parte del estudio, coincidió en que "la cirugía no es garantía de felicidad".
"A menudo nos dicen que la cirugía de afirmación de género es esencial para aliviar la disforia de género, pero ¿qué sucede cuando la euforia se desvanece?", dijo en una entrevista con Fox News Digital.
"La pregunta clave sigue siendo: ¿la cirugía en sí misma causa angustia o hay problemas de salud mental preexistentes que impulsan a las personas a someterse a ella? ¿Correlación o causalidad? Nadie lo sabe".
Posibles causas de la disforia de género
Un estudio de 2022 mostró que alrededor de 1,4 millones de adultos estadounidenses se identifican como transgénero y aproximadamente el 0,6% de todos los adultos estadounidenses experimentan disforia de género.
"La dramática tendencia al alza de la disforia de género entre los jóvenes en los últimos años debería plantear serias preguntas sobre el papel de las influencias culturales y sociales", dijo Alpert.
"Si bien una mayor conciencia ha hecho que sea más fácil para algunos niños expresar sus luchas, no podemos ignorar la posibilidad de que el contagio social, junto con la influencia de los compañeros y las redes sociales, puedan estar contribuyendo a este aumento".
Ambos expertos advierten que no hay que apresurarse a someterse a una cirugía u otras decisiones irreversibles.
Los adolescentes que reciben tratamiento por disforia de género deben recibir "el apoyo adecuado y un trato compasivo" sin presionarlos para que tomen decisiones médicas que "cambien sus vidas", aconsejó Alpert.
"No se amputa una extremidad por un dolor temporal y, sin duda, no se altera el cuerpo de forma permanente sin agotar antes todas las demás opciones".
Osborn también destacó la necesidad de realizar evaluaciones psicológicas integrales, especialmente para quienes tienen problemas de salud mental preexistentes. El apoyo en materia de salud mental, las modificaciones del estilo de vida y el asesoramiento deben tener prioridad antes de la cirugía, no después, dijo.
"No se amputa una extremidad por un dolor temporal y, sin duda, no se altera el cuerpo de forma permanente sin agotar antes todas las demás opciones", dijo.
Osborn expresó las mismas advertencias sobre la terapia hormonal: "estamos hablando de cambios irreversibles que exigen un tratamiento de por vida".
"No se trata de política ni de ideología, se trata de salud, longevidad y de asegurarse de que las personas no se sometan a procedimientos drásticos que alteren la vida solo para arrepentirse", dijo.
"Dicho esto, en gran medida, la carga recae sobre nosotros, los médicos, que hicimos un juramento de no hacer daño en primer lugar".
Mark Trammell, director ejecutivo de The Center for American Liberty, que brinda representación legal a personas que están destransicionando después de cirugías trans, proporcionó la siguiente declaración a Fox News Digital.
"La cirugía por sí sola no elimina las complejas cargas psicológicas que surgen del estigma social y las luchas personales con la identidad".
"Los hallazgos de este estudio deberían servir como una llamada de atención. Pero para los jóvenes que han dejado de ser transgénero y que representamos en demandas contra clínicas de género, estas estadísticas son la realidad que viven", dijo.
"Su llamada 'atención de afirmación de género' no alivió su angustia, sino que creó nuevos problemas de salud mental y, para muchos, introdujo pensamientos suicidas por primera vez. Es por eso que estamos luchando para que los responsables rindan cuentas".
Fox News Digital se puso en contacto con los investigadores del estudio para solicitar comentarios.
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