En definitiva, lo que 60 Minutes y sus dueños corporativos han cometido es una de las ilegalidades más atroces en la historia de la radiodifusión.

 El caso que tenemos contra 60 Minutes, CBS y Paramount es un verdadero éxito. Engañaron y defraudaron al pueblo estadounidense a niveles nunca antes vistos en el ámbito político. A Kamala Harris, durante la votación anticipada e inmediatamente antes del día de las elecciones, le hicieron una pregunta y dio una respuesta tan mala e incompetente que le habría costado muchos de los votos que finalmente obtuvo. ¡Fue una respuesta desastrosa! 60 Minutes y sus empresas matrices, para evitar que esto le afectara negativamente, eliminaron la respuesta de Kamala por completo, palabra por palabra, y la reemplazaron con una respuesta que dio posteriormente a una pregunta completamente diferente. La nueva respuesta no era buena, pero no demostraba una incompetencia flagrante como la que eliminó 60 Minutes. En otras palabras, 60 Minutes perpetró un fraude masivo contra el pueblo estadounidense, la Comisión Federal de Elecciones y el Sistema Federal de Comunicaciones. A pesar de todo lo anterior, y de la admisión de este delito por parte de Paramount, CBS y 60 Minutes, junto con otras supresiones corruptas similares de respuestas a preguntas, el fallido New York Times, que es una fuente de noticias falsas tanto por escrito como por encuestas, afirma que la gente dijo que el caso carece de fundamento. No lo dicen en serio, simplemente padecen un síndrome de trastorno mental de Trump incurable, posiblemente hasta el punto de que la intervención del Times los hace responsables de interferencia ilícita, incluso en elecciones, que estamos estudiando con atención. En definitiva, lo que 60 Minutes y sus dueños corporativos han cometido es una de las ilegalidades más atroces en la historia de la radiodifusión. Nunca antes se había hecho algo como esto: la creación ilegal de una respuesta para un candidato presidencial. Tienen que pagar un precio, y el Times también debería asumir la responsabilidad por su probable comportamiento ilegal. ¡Es vital que estos mentirosos y estafadores rindan cuentas!